
Muchas veces gandes películas sufren el destino de ser relegadas a la oscuridad en las salas al no tener las enormes campañas publicitarias de las enormes producciones comerciales. Afortunadamente este no es el caso de
Siempre estaré a tu lado, "Hachiko: A dog's story" una cinta que ha tenido una gran recepción del público y lo que es mejor aún, la taquilla suficiente para permanecer en cartelera.
¿Cómo lo logró?
Fácil, con la misma "estrategia" que tuvieron en un inicio los libros de Harry Potter. Con la promoción de boca en boca que han dado los cinéfilos que han vivido esta conmovedora película basada en la histroria del perro más fiel de Japón, también llamado Hachiko y que en ambos casos es de raza Akita.
En la película Hachiko, apodado “Hachi”, es el compañero inseparable de su Parker (Richard Gere), su amo por un golpe del destino en uno de los escenarios más increíbles: la estación de tren donde cada mañana Parker y Hachiko comparten un instante donde se despiden para luego reencontrarse por la tarde.

Contar más de la película es una osadía que no realizaré pero si me gustaría resaltar que la historia de Hachi nos muestra la devoción de un perro fiel a su amo y cómo el más simple de los actos puede llegar a ser el más grande gesto de amor. (La foto en blanco y negro es de Hachiko ya en sus años de vejez).
Si bien adaptada a los Estados Unidos, la historia de Hachiko es real, sucedió por los años 1923 a 1935 en la ciudad de Odate prefectura de Akita en Japón. En el nombre de Hachiko "hachi" sifnifica 'ocho' indicando que fue el octavo perrito de su camada y el sufijo "ko" que se refiere a un miembro de la familia. Hachiko fue un Akita que es recordado aún hoy en día por su lealad, al grado de que hay una estatua en su honor en la estación Shibuya donde se desarrolló su historia.

Sin lugar a dudas una entrañable historia que recomendamos ampliamente.
Comentó... Dulce Lissentari.
Nota de los reporperros:
-Oye Tito, ¿Dulce ya dejó de llorar?
-No lo sé Soiree, aún no terminó de quitar la inundación... espero que tanto llanto no dañe la computadora.
-No sé porque lloró tanto.
-Si claro, como si tú no hubieras llorado.
- n_n'